Como en otras muchas facetas de la vida, internet se ha convertido en una fuente inagotable de información y referencias. En este caso, y debido a la sobre información, se hace conveniente tener en consideración una serie de parámetros para discernir las buenas de las malas videntes. En el artículo que ahora comienza se esbozará, de modo sucinto, algunos elementos para dar con las mejores videntes por internet.
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Videntes por internet y Tarotistas Online
Internet es a día de hoy un universo inagotable de información, posibilidades y opciones. Ocurre que en los últimos años, también dentro de un contexto relacionado con la videncia y el tarot, hemos pasado de una escasa información y opciones a una saturación de servicios, ofertas y competencias entre distintas profesionales de la videncia.
Es conveniente analizar y dicha oferta de servicios y quedarnos con aquellos serios, profesionales y que pueden aportarnos algo.
Es difícil, muy difícil dar, entre tanta supuesta vidente y tarotista, dar con una vidente natural seria, fiable y honesta, sin embargo existen ciertos indicios que pueden llevarnos a intuir qué tipo de persona es esa vidente o esa tarotista a la que estamos a punto de llamar y depositar toda nuestra confianza.
En primer lugar, no debemos dejarnos influenciar por eslóganes como “vidente natural” o “la mejor videncia” o “la solución a tus problemas”. La videncia no soluciona problemas, aporta información y nos aclara distintas cuestiones relacionadas con el futuro, los sentimientos o nuestra propia persona, pero jamás nos solucionará problema alguno, ya que ello es una cuestión propia y personal. Debemos huir, por lo tanto de este tipo de eslóganes que tanto proliferan en la red y que nos dificultan encontrar a las verdaderas videntes por internet.
Por otro lado, será esencial prestar atención a las opiniones de distintos usuarios en relación a los servicios de la vidente que queremos consultar. Muy pocas tienen el honor de ser las mejor valoradas por sus clientes, ello es un punto muy positivo a la hora de confiar y de realizar nuestra llamada. Es, por lo tanto, una cuestión fundamental informarnos sobre la vida, el tipo de tarot o videncia que realiza la persona a la que vamos a llamar, pero sobre todo, que opiniones tiene de otras personas que han confiado en ella anteriormente.
Videntes por internet buenas y honradas
Una vez que hemos dado con la persona que creemos adecuada, siempre en función de nuestras necesidades y del tipo de consulta que queremos hacer, merece la pena realizar una llamada y ver cómo nos encontramos, cómo nos sentimos. Es esencial sentirse cómodo y que la vidente o la tarotista que nos atiende nos trate como merecemos. Incluso, en este punto podemos realizar algún tipo de pregunta sobre su método predictivo o su especialidad.
En esta primera toma de contacto será esencial, por otro lado, que la vidente o la tarotista no nos haga preguntas personales. Quien debemos preguntar somos nosotros, incluso es factible preguntarle algún tipo de dato personal de nuestro pasado, a modo de comprobar su poder de intuición y adivinación.
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En principio, tanto si se trata de una verdadera vidente natural como de una tarotista experimentada, no requieren de ningún tipo de pregunta personal, en ambos casos existe la capacidad para sentir, intuir y adivinar a través de la intuición natural de la vidente o de las cartas si se trata de una tarotista. En el caso de que se excedan en cuestiones y preguntas personales, debemos poner en duda su trabajo y su supuesta condición de vidente o tarotista. Tanto en el caso de que tengamos dudas como en el supuesto de que no estemos cómodos, se recomienda despedirse cortésmente y colgar el teléfono.
A modo de conclusión, diremos una vez más que la mejor tarotista es, en principio, aquella que mejor se adecue a nuestra personalidad y nuestras necesidades, si bien es esencial evitar, con estas simples precauciones reseñadas, cualquier tipo de fraude o decepción con una supuesta vidente.