La videncia online es una de las últimas modas que, cada vez con mayor persistencia, se está imponiendo. Existen, por un lado, miles de webs anunciando todo tipo de remedios y sortilegios adivinatorios; por otra parte también es común encontrar distintos tipos de tarot online, en los que podemos, supuestamente, preguntar y saber nuestro futuro.
Sobra decir que en muchos casos detrás de estos supuestos anuncios web de “videncia online” se esconden personas desaprensivas que solo piensan en su lucro personal, sin tener en consideración el estado de ánimo de las personas que recurren a sus métodos.
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Convendría, en este punto, reflexionar, de manera sucinta, sobre las distintas webs-milagro de videncia online que podemos encontrar.
Videncia online
En primer lugar se podría decir que todas prometen un servicio serio, profesional y riguroso. Sin embargo muy pocas o casi ninguna se basa en la propia experiencia de las personas que requieren los servicios de videncia. Nosotros, nuestras videntes son valoradas a través de su experiencia y la solvencia de su trabajo, son los usuarios quienes determinan la importancia y el valor de cada una de nuestras videntes naturales. Por otra parte, muy pocas personas pueden jactarse de los premios y los reconocimientos a nivel nacional e internacional que poseen algunas de nuestras videntes.
La calidad es siempre algo determinante, más allá de lo publicitario, del marketing y o de las promesas, importa el reconocimiento de otras personas a través de la seriedad, la eficiencia y el trato de cada una de nuestras videntes.
Otra cuestión que debemos plantearnos al respecto de la videncia on-line es el desconocimiento de la persona que se promociona a través de la web. En nuestro caso, todas nuestras videntes poseen en www.lasmejoresvidentes.es y www.guiadetarotistas.es unas reseñas biográficas y una presentación; de esta manera en todo momento sabremos con quien estamos hablando.
En este contexto on-line, debemos huir de las promesas ya que, los verdaderos videntes no necesitan prometer nada, ni venderse; su trabajo y su eficiencia habla por ellos.
Al respecto de la videncia on-line mediante la tirada de cartas, se podría decir que uno sospecha que las cartas pueden aparecer más debido a un programa informático y de desarrollo que al mero azar.
Es además muy común a todo este tipo de webs y de proposiciones esotéricas el hecho de que toda persona que se anuncia se declare “vidente natural”. De un modo u otro, si se requiere la necesidad de usar Tarot o cualquier otro tipo de oráculo, estará cayendo en una seria contradicción, ya que una vidente natural no requiere necesariamente el uso del Tarot, en algunos casos se puede usar como apoyo, o como canal de transmisión del poder clarividente, pero nunca como elemento esencial.
Tarot y Videncia online
Diremos que, en esencia, una videncia on-line requiere de cierta información fidedigna, de saber qué persona tenemos al otro lado de la web: su experiencia y su valor añadido. Ello es una cuestión complicada y muy delicada, ya que debemos poner nuestra confianza y nuestros sentimientos en alguien que verdaderamente no conocemos.
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Diremos que lo esencial para una sesión seria, honesta y profunda es establecer un vínculo, en este caso, a través del teléfono se crea un nexo entre nuestra vidente y la persona que llama, una vinculación que difícilmente se puede realizar a través de una web en la que prometen mucho pero demuestran poco.
Las mejores videntes son aquellas personas, como hemos dicho antes, que ayudan y ponen a tu disposición todo su poder, su capacidad de ayudarte y de aconsejarte, sin más necesidad de promesas o panaceas. La felicidad, tal y como dicen nuestras videntes, la encuentra uno en su propia persona, dentro de sí mismos, no está por tanto en el futuro, sino en nuestras acciones y nuestras decisiones en función de la información aportada por la vidente. Fíjate también en estos consejos que da eldia.es para encontrar videntes fiables.
Por ello tenemos una oportunidad excepcional… tan solo nos separa de esa felicidad una llamada del teléfono y preguntar aquello que se nos antoja necesario o doloroso, nuestras videntes, sin promesas, ejerciendo su vocación y su pasión, sabrán como aconsejarte y guiarte hacia la luz.